El Día Internacional de la Paz se celebra en todo el mundo cada año el 21 de septiembre. Establecido en 1981 por resolución unánime de las Naciones Unidas, esta es una fecha compartida a nivel mundial para que toda la humanidad se comprometa con la paz por encima de todas las diferencias y contribuya a la construcción una cultura pacífica. Somos conscientes de que, para lograr entornos pacíficos, se deben tomar medidas pertinentes que fortalezcan el desarrollo social y económico de todas las personas y garantizar la protección de sus derechos. Los Objetivos Sostenibles abarcan una amplia variedad de materias, entre las que se incluyen: pobreza, hambre, salud, educación, cambio climático, igualdad de género, agua, saneamiento, electricidad, medioambiente y justicia social. Por eso, con el Plan de Desarrollo ‘Santander Siempre Contigo y Para el Mundo 2020-2023’, el gobierno en cabeza de Mauricio Aguilar Hurtado plasmó una hoja de ruta que garantizará con cada proyecto la equidad social, la seguridad, el bienestar y por ende, la paz en todo el territorio santandereano. Desde las prácticas cotidianas, usted también puede aportar al propósito de la paz y mejorar así la convivencia diaria en todos los escenarios.
Rechace las diferentes expresiones de violencia, así como las justificaciones que intentan legitimarla.
- Piense bien de los demás. A la hora de interactuar con otros, tenga presente que la percepción positiva que tiene de sí mismo puede extenderla a quienes lo rodean.
- Transforme su lenguaje. Reemplace las palabras que contribuyen al odio y la venganza por expresiones de esperanza y otros pensamientos positivos.
- Reconozca por qué existen y para qué sirven las normas. Sólo así entenderá la importancia de respetarlas para vivir en comunidad.
- Ante una situación de conflicto, propóngase conocer y entender las motivaciones e intereses del otro. Mediante el diálogo, busque alternativas creativas para transformarla en una oportunidad de aprendizaje.
- Practique la empatía. Sea generoso, considerado y cuide del otro, preocupándose por su bienestar.
A través de estas simples acciones, usted puede aportar a la transformación de una cultura de la paz.